La atención postmortem, también conocida como cuidados postmortem, es una práctica esencial en el campo de la medicina y el cuidado de pacientes. Este proceso incluye desde el acondicionamiento del cuerpo hasta la preparación para su entierro o cremación, y sigue estrictos protocolos de higiene, respeto y profesionalismo. En este artículo, exploraremos los pasos clave en el cuidado postmortem, el equipo y los materiales empleados, y cómo se asegura una despedida digna.
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Índice de contenidos
¿Cuáles son los cuidados postmortem?
Los cuidados postmortem incluyen varios pasos diseñados para asegurar que el cuerpo del fallecido sea tratado con el máximo respeto y cuidados. Estos cuidados cumplen varios objetivos, como prevenir la descomposición temprana, reducir los riesgos de contaminación y ayudar a las familias a enfrentar el proceso de duelo.
Algunos de los cuidados postmortem principales incluyen:
- Aseo y limpieza del cuerpo. Uno de los primeros pasos en los cuidados postmortem es limpiar el cuerpo para eliminar cualquier rastro de sangre, fluidos corporales u otros elementos. Esto es importante para preservar la dignidad de la persona fallecida y es especialmente relevante cuando el cuerpo será velado o entregado a la familia.
- Posicionamiento adecuado. Se coloca al fallecido/a en una postura digna, usualmente de decúbito supino (boca arriba), con los brazos a los lados sobre el abdomen. Esto permite que el cuerpo tenga una apariencia más serena y evita rigideces incómodas.
- Cierre de ojos y boca. El cierre de los ojos y la boca se realiza como parte de los cuidados postmortem para dar una apariencia natural y calmada al rostro del fallecido/a.
- Colocación de etiquetas de identificación. Para evitar cualquier error, se colocan etiquetas de identificación en el cuerpo. Esto es vital para garantizar que el fallecido/a sea debidamente identificado en cada paso del proceso postmortem.
- Cubrir el cuerpo. Finalmente, el cuerpo es cubierto con una sábana limpia o una tela específica para el transporte. Esto ayuda a mantener el respeto hacia el fallecido/a y su familia.
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¿Cómo es el proceso postmortem?
El proceso postmortem sigue una serie de pasos estandarizados, aunque puede variar ligeramente según las prácticas culturales, religiosas y el lugar donde ocurre el deceso (hospital, hogar, etc.). A continuación, describimos el proceso postmortem en técnicos generales.
Verificación de fallecimiento
El primer paso en el proceso postmortem es la confirmación del fallecimiento por parte de un/a profesional de salud autorizado. Esto implica verificar la ausencia de signos vitales como pulso, respiración y reflejos neurológicos.
Documentación del deceso
Una vez confirmado el fallecimiento, se registra el deceso en los registros médicos, detallando la hora exacta y las condiciones en que ocurrió. Esta documentación es esencial tanto desde un punto de vista médico como legal.
Preparación del cuerpo
Posteriormente, el personal encargado realiza la preparación del cuerpo, que incluye la limpieza, el cierre de los ojos y boca, y el posicionamiento adecuado, como se describió anteriormente. Este paso es crucial para facilitar el manejo del cuerpo y asegurar una apariencia digna.
Cuidado del entorno
Es importante limpiar y desinfectar el entorno donde ocurrió el fallecimiento, sobre todo en el caso de enfermedades contagiosas. Este paso también es crucial en hospitales o residencias para asegurar la seguridad del personal y otros pacientes.
Traslado del cuerpo
Finalmente, el cuerpo es trasladado a la morgue o a la funeraria correspondiente, dependiendo de los deseos de la familia y las normativas locales. En este punto, la atención postmortem se considera completa, aunque la familia puede seguir un proceso de duelo y ceremonias funerarias.
¿Qué material y equipo se utilizan para la atención postmortem?
La atención postmortem requiere una serie de materiales y equipos para asegurar que el proceso se lleve a cabo de manera segura, respetuosa y efectiva. Algunos de estos materiales incluyen:
- Guantes desechables. El uso de guantes es fundamental para proteger al personal encargado y reducir el riesgo de contaminación o infección.
- Toallas y productos de limpieza. Estos productos se utilizan para limpiar el cuerpo y asegurar que no queden restos de fluidos corporales.
- Sábanas y telas especiales. Se utilizan para cubrir el cuerpo y mantener la dignidad de la persona fallecida.
- Etiquetas de identificación. Las etiquetas se colocan en el cuerpo para asegurar una identificación precisa.
- Bolsa mortuoria. Dependiendo de las regulaciones locales, puede ser necesario colocar el cuerpo en una bolsa específica para su traslado a la morgue o al lugar donde se realizaran las ceremonias funerarias.
- Desinfectantes y productos de higiene. La limpieza y desinfección del área donde ocurrió el fallecimiento es esencial, sobre todo en casos de enfermedades contagiosas.
- Instrumentos médicos básicos. En algunos casos, el personal puede necesitar termómetros, estetoscopios y otros instrumentos para verificar la ausencia de signos vitales.
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